Mientras en países como Gran Bretaña se plantean algunos cambios en el modelo de enseñanza, en España educadores, padres, medios y políticos siguen reflexionando sobre el asunto sin llegar a conclusiones claras ni a medidas concretas para mejorar el sistema y sus resultados. La última muestra fue el debate lanzado el pasado viernes por el programa matutino de Radio Nacional de España dirigido por Juan Ramón Lucas; el tema central, el fracaso escolar, sus causas y soluciones.
Al margen de lo que plantearan los contertulios es interesante prestar atención a las opiniones de los oyentes, tanto los que intervenían por teléfono como quienes dejaron su opinión en el blog del programa: todos ellas tienen un valor especial porque provienen de quienes viven día a día el proceso educativo, como padres, como alumnos o como educadores. Aún repitiendo los manidos argumentos y acusaciones pudieron oírse y leerse argumentos que al resumirse resultan aclaratorios.
• Atender a las necesidades de cada uno: “Se está dando mucho bombo a los que cojean y se olvidan de ayudar a los que lo hacen bien” comentaba coloquialmente un oyente, refrendado más literariamente por otro que apuntaba que “el fracaso escolar es un problema de escasez de medios para atender individualmente las necesidades y problemas de ciertos alumnos”. Es decir, se percibe falta de atención personalizada, adaptada a las necesidades de cada alumno y sus diferencias.
• Contar con más medios: En esa misma línea, otros apuntaban que “es muy problemático tratar con un número de alumnos alto por clase”, a la vez que se destacaba que “el fracaso viene también por la precariedad en las instalaciones” o el más expeditivo “si no hay dinero, no hay educación”. Es decir, también se achaca el problema a la falta de inversión en educación.
• Motivar: “Hay alumnos a los que estudiar no les atrae” comentaba otro oyente, a la par que apuntaba que “hay profesores que no se molestan mucho en captar su atención”. De esta manera se describe gráficamente la falta de motivación existente no sólo entre los alumnos, que no entienden la utilidad de estudiar y al mismo tiempo no se sienten atraídos por la forma en que se les transmiten los conocimientos; y por otro lado, la falta de orientación en el propio docente, que necesita más herramientas pedagógicas para lidiar con las nuevas generaciones y aprender a motivarlas.
• Esforzarse y respetar: “Los chavales vienen sin concepto de rutina, esfuerzo ni disciplina” explica un oyente, mientras otro señala que “se le ha quitado toda la autoridad a los profesores”. Es decir, se percibe una carencia creciente de valores culturales en torno al trabajo y al esfuerzo, pero también sociales, frente a la autoridad docente (el autoritas, que lo alcanza por su conocimiento, no por la fuerza) y el importante papel que desempeñan los educadores.
• Enseñar a aprender: “Hay que enseñar a estudiar” reclama otro oyente, “aprender a aprender”, refrendado por varios oyentes en el mismo sentido. Una vez más se reclama la importancia de un sistema pedagógico que dote a los alumnos de herramientas válidas para el futuro y no sólo conocimientos teóricos, que también son necesarios.
Desde Educa-System poco más podemos aportar al debate salvo evidenciar que todas esas necesidades son las que paliamos cada día con las clases particulares que impartimos en toda España y ahora en México a través de nuestras franquicias. Y al hacerlo nos vemos reflejados en los puntos descritos en este post, al ser los principales criterios de nuestro método: personalización, medios, motivación, esfuerzo, respeto y pedagogía.
Quizás no podamos resolver solos el fracaso escolar de todo un país, pero tenemos claro que nuestra actividad diaria y nuestra experiencia es clave para cada alumno y cada familia que acude a nosotros pidiendo ayuda. Quizás sea hora de que quienes administran ese bien tan precioso, que es la Educación, también lo hagan y llamen a nuestra puerta sin miedo. Porque quizás también a ellos podamos enseñarles algo.
