Esta semana dan comienzo en todo el mundo las celebraciones del Año Internacional de la Química y como indican algunos expertos en artículos publicados en distintos medios es una ocasión inigualable para explicar lo que significa la Química y eliminar así ese velo de negatividad y a la vez oscurantismo que suele envolverla.
Y es que la Química es frecuentemente denostada por la sociedad, que ve en ella más cuestiones negativas, como la guerra química o la contaminación química que positivas, como las soluciones que aporta a nuestra vida cotidiana o simplemente su esencia, tan natural como la de cualquier otro elemento de nuestro entorno. También es rechazada a menudo por los estudiantes que la recuerdan más como esa materia llena de números, símbolos y fórmulas que como una ciencia que nos ayuda a entender el mundo y a transformarlo.
Nada más lejos de la realidad, pues estamos hablando de nosotros mismos, pues ¿qué somos sino un conjunto de moléculas, al igual que todo lo que nos rodea: el aire, el agua, el suelo, etc?. Tan es así, que la Química no sólo nos ayuda a entender nuestro entorno sino nuestro origen, ese barro primigenio donde se formaron las primeras células vivas y interactuaron para generar organismos complejos. O ¿Cómo entender lo que ocurre en nuestro propio cuerpo, donde interaccionan continuamente elementos orgánicos y químicos…? De nuevo, como en tantas otras materias, el conocimiento nos ayuda a entender la realidad en la que vivimos y al estudiarla no sólo estamos aprobando un examen ¡sino mucho más!